¿Qué ocurre si dejas de usar tu tarjeta de crédito?
26/09/2025
Muchas personas piensan que dejar de usar una tarjeta de crédito no genera consecuencias. Sin embargo, la inactividad puede afectar tu historial crediticio, tu relación con el banco e incluso generar costos inesperados.
Aunque no la uses, tu tarjeta sigue activa y puede representar ventajas o riesgos según cómo la manejes. Conoce qué sucede cuando una tarjeta permanece inactiva, qué beneficios se pierden y cómo mantenerla bajo control con las herramientas de Banreservas.
Una tarjeta inactiva es aquella que no registra consumos durante un periodo prolongado. Esto no implica que esté cancelada, sino que simplemente no se ha utilizado.
Es importante diferenciar entre “no usarla” y “cerrar la cuenta”. Mientras una cancelación es definitiva, una tarjeta inactiva puede seguir generando cargos o afectar tu perfil crediticio sin que lo notes.
Los bancos suelen interpretar la inactividad como falta de interés en el producto o como un riesgo de incumplimiento futuro.
El historial se construye con base en el uso responsable de la tarjeta. Si no la usas, el banco reporta poca o nula actividad, lo que puede reducir tu score y limitar tus opciones de financiamiento a futuro.
Algunas entidades cierran cuentas que permanecen inactivas por largos periodos. Esto puede reducir tu acceso al crédito y disminuir el límite total que tenías disponible.
Aunque no realices consumos, la tarjeta puede generar cargos por mantenimiento, seguros asociados o anualidades. Estos pagos acumulados se convierten en deudas que afectan tu historial si no los cubres.
Mantener tu tarjeta activa con un uso responsable tiene ventajas importantes. Una de ellas es que ayuda a fortalecer tu historial crediticio al demostrar que manejas de forma correcta el crédito otorgado.
Además, te permite acceder a promociones, descuentos, programas de lealtad y mayor respaldo financiero en imprevistos. Incluso si no es tu medio de pago principal, mantenerla activa puede mejorar tu perfil bancario y darte flexibilidad en caso de emergencias.
La respuesta depende del tipo de tarjeta y de las condiciones de tu contrato. Si tu tarjeta tiene altas comisiones o beneficios limitados, quizá sea mejor cancelarla.
En cambio, si es gratuita o cuenta con promociones atractivas, conviene mantenerla activa con consumos pequeños y pagos puntuales. Lo más recomendable es evaluar si realmente aporta valor a tu vida financiera antes de tomar una decisión.
Una de las mejores formas de mantener activa tu tarjeta es usarla en gastos rutinarios. Pagar servicios básicos como luz, agua, gasolina o incluso compras de supermercado asegura movimiento constante.
Estos consumos no ponen en riesgo tu presupuesto, mantienen la tarjeta vigente y, además, fortalecen tu historial crediticio con pagos puntuales.
Asociar la tarjeta a pagos recurrentes como internet, telefonía o suscripciones digitales es una estrategia práctica. Así garantizas que cada mes exista un cargo y no dependes de recordatorios personales.
Además, este hábito te ayuda a mantener un historial de uso continuo, evitando que la tarjeta quede inactiva y demostrando responsabilidad de pago ante el banco.
Incluso si usas la tarjeta de manera ocasional, es clave revisar periódicamente los movimientos desde la banca digital o la aplicación móvil. Esto te permite confirmar que todo esté en orden y detectar cargos indebidos o comisiones sorpresivas.
El seguimiento frecuente también te da mayor control sobre tus finanzas y evita que se acumulen deudas por descuido.
La tarjeta de crédito debe usarse con moderación, como una herramienta financiera y no como una extensión de tus ingresos. Establece un presupuesto mensual para sus consumos y respétalo.
Banreservas pone a tu disposición soluciones digitales que facilitan el manejo responsable de tus tarjetas. Con la App Banreservas y la Banca en Línea puedes:
● Revisar en tiempo real tu saldo y límite disponible.
● Configurar alertas de consumo para controlar tus gastos.
● Activar o bloquear tu tarjeta de manera temporal si no la usas.
● Programar pagos automáticos que mantengan tu cuenta al día.
Estas herramientas te permiten tener control total sobre tu tarjeta, incluso cuando no la utilizas con frecuencia.
No usar tu tarjeta de crédito por largos periodos puede traer consecuencias como pérdida de historial crediticio, cancelación de la cuenta o cargos innecesarios.
La mejor alternativa es mantenerla activa con consumos moderados y pagos puntuales, aprovechando los beneficios que ofrece. Con las herramientas digitales de Banreservas, administrar tus tarjetas se vuelve más simple, seguro y responsable.